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¡Liberaron al autor intelectual del asesinato de un abogado en Calvillo!

SAGUASCALIENTES, AGS.- Tras permanecer preso casi tres años, fue dejado en libertad el autor intelectual del asesinato del abogado Alfredo Martínez Xacur, de 28 años de edad, en su domicilio en el municipio de Calvillo la madrugada del domingo 16 de octubre del 2011, debido a que estaba pretendiendo cortejar a su esposa.

El acusado, Ezequiel Pompa Capistran, casado, originario de México, D.F., y con domicilio en la calle José Rosario Cardona número 104 de la comunidad de Malpaso en Calvillo, obtuvo un amparo de un juez federal de Zacatecas y con las reservas de ley salió del CERESO Aguascalientes el pasado martes 17 de junio, pese a que se encontraba sujeto a un proceso penal por el delito de homicidio doloso calificado con premeditación, ventaja y alevosía.

Junto con él fueron arrestados Juan de Lara Chávez, de entonces 16 años de edad, que fue el que mató al abogado y por lo cual recibió una medida de seguridad de 13 años de reclusión (equivalente a una sentencia) y otros dos sujetos, que permanecen presos en el reclusorio a la espera de recibir su condena.

Éstos son el agricultor Javier Díaz Meza (a) “El Javo”, soltero y con domicilio en la avenida Las Américas número 12 del fraccionamiento Vista Hermosa, en dicho municipio, y el ex policía municipal de Calvillo y albañil Juan Cerón Jiménez (a) “El Pantera”, con domicilio en la calle Libertad número 701 de la zona centro calvillense.

El entonces adolescente fue el que le disparó a Alfredo con un arma corta calibre 9 milímetros en el interior del domicilio de éste, en la privada Terán número 111 en la zona centro de Calvillo.

En su oportunidad, la Policía Ministerial informó que, aparentemente, Alfredo pretendía cortejar a una mujer identificada como Claudia Iveth Hernández Muñoz, esposa de Ezequiel, a quien constantemente mandaba saludar y decirle que estaba muy guapa.

Al enterarse de lo anterior, Ezequiel la interrogó al respecto y ella le dijo que sí conocía a Alfredo pero que habían sido amigos de la secundaria, aunque él decidió mandarlo matar.

Ezequiel resultó ser dueño del negocio “Vinos y Licores El Álamo”, ubicado en el boulevard Rodolfo Landeros y el libramiento a Jalpa, hasta donde un día llegó “El Javo” para preguntarle por un arma de fuego que quería comprar, pero le propuso un “trabajo”, que consistía en matar a Alfredo, ofreciéndole 10 mil pesos a cambio.

“El Javo” aceptó el “trabajo” pero contactó a “El Pantera” para que éste llevara a cabo el asesinato y éste también aceptó, aunque luego se arrepintió y decidió invitar al adolescente para que fuera él quien asesinara al abogado, a lo que éste estuvo de acuerdo.

Ezequiel le entregó una pistola a Javier y un adelanto de 5 mil pesos por el “trabajo”, por lo que éste le hizo llegar el arma a Juan y parte del dinero. A su vez, el ex policía se la entregó al adolescente, que estuvo vigilando los movimientos de Alfredo y lo asesinó la madrugada del domingo 16 de octubre del 2011, luego de que éste regresó a su casa en su auto Volkswagen Bora gris después de haber estado en un antro y en una fiesta.

El adolescente le disparó en una sola ocasión y el proyectil le atravesó el brazo derecho al abogado y se le incrustó en el pecho, por lo que tuvo una muerte instantánea.

Al día siguiente, el asesino le regresó el arma a Juan y éste a Javier y éste a Ezequiel, pero cuando supo que con ella mataron a Alfredo no la aceptó, por lo que “El Javo” se la quedó para tratar de venderla.

A través de una llamada anónima, agentes ministeriales supieron que el profesionista fue asesinado por un adolescente, por lo que lo detuvieron y éste lo aceptó, pero dijo que Juan lo contrató, por lo que también se le localizó y arrestó.

“El Pantera” aceptó estar involucrado en el caso pero confesó que “El Javo” fue el que lo contrató, por lo que éste fue ubicado y detenido, asegurándosele el arma homicida.

Javier dijo que Ezequiel fue el que ordenó el asesinato de Alfredo porque estaba pretendiendo a su esposa, por lo que los agentes acudieron a su negocio y también lo aprehendieron.

Los cuatro fueron encarcelados para ser procesados y en primera instancia el juez Especializado en Justicia para Adolescentes impuso un castigo de 13 años de internamiento al entonces menor de edad por su participación en el crimen.

Ezequiel promovió varios recursos para defenderse y logró que un juez federal de Zacatecas le otorgara un amparo, por lo que pudo salir libre con las reservas de ley, pese a que fue señalado como el autor intelectual del asesinato del abogado.

Al parecer, el amparo se le concedió porque en el expediente del caso había algunas irregularidades, aunque no se aclararon de qué tipo.

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