¡Sentencian a 48 años 6 meses de prisión a 2 zacatecanos por secuestro y violación!

• En Aguascalientes plagiaron a una joven y la ultrajaron; fueron detenidos en Villa García, Zacatecas

AGUASCALIENTES, AGS.- El juez Segundo Penal impuso ejemplares y merecidas sentencias para los dos zacatecanos que secuestraron y violaron a una joven de 18 años de edad -estudiante de preparatoria- y por cuyo rescate exigían a su familia la cantidad de 500 mil pesos en efectivo, al condenarlos, a cada uno, a 48 años 6 meses de prisión.

Los encontró culpables por los delitos de secuestro y violación.

Los zacatecanos plagiaron a la víctima en esta ciudad al encontrarse bajo los influjos de las drogas y tras elegirla al azar ya que, según ellos, no la conocían y se la llevaron hasta el municipio de Villa García, Zacatecas, donde agentes de la Policía Ministerial de Aguascalientes, con apoyo de efectivos de aquella entidad, la rescataron y detuvieron a los dos tipos cuando pretendían cobrar el dinero del rescate.

Los sentenciados son Rodrigo Jonathan Olvera Zapata (a) “El Jona”, de 23 años y con domicilio en la calle Vicente Guerrero número 113 de la colonia Vega, en Loreto, Zac., y Luis Enrique Ojeda Vázquez (a) “El Patolo”, de 24 y vecino de la avenida Patria número 157 de la colonia Constitución, en Villa García, Zac.

El secuestro ocurrió el jueves 27 de octubre del 2011 en el fraccionamiento Pensadores Mexicanos, en el nor-oriente de la capital.

Ese día, alrededor de las 06:50 horas, la víctima salió de su casa para dirigirse a estudiar a una escuela, pero en la calle, aprovechando que aún estaba oscuro y que nadie los veía, los dos sujetos la interceptaron y subieron a la fuerza a una camioneta Grand Voyager, en color blanco, en la que se la llevaron.

“El Jona” y “El Patolo” cobardemente golpearon a la estudiante para someterla y al subirla al vehículo le exigieron que se acostara en el piso y no gritara ya que de lo contrario la matarían, por lo que tuvo que obedecerlos.

Los tipos enfilaron hacia Zacatecas y a las 07:40 horas, del teléfono celular de la víctima, le llamaron a sus padres.

Contestó su papá, por lo que la joven le dijo que una persona quería hablar con él.

Uno de los sujetos se puso al teléfono y le dijo que tenían secuestrada a su hija y que si la querían volver a ver con vida tendría que pagar 500 mil pesos, comentándole que más tarde le llamarían otra vez para darle indicaciones.

Los padres no dudaron ni un instante que efectivamente su hija había sido privada de su libertad y acudieron a la Policía Ministerial para pedir ayuda, por lo que varios agentes investigadores tomaron cartas en el asunto y comenzaron a darles asesoría sobre cómo manejar la situación y qué hacer cuando los secuestradores volvieran a llamarles.

Los plagiarios les llamaron hasta en 10 ocasiones a los familiares de la joven, ordenándoles que se dirigieran al municipio de Loreto, Zac., y que al llegar recibirían más instrucciones.

Los policías ministeriales entablaron contacto con sus homólogos de Zacatecas, a quienes pusieron al tanto del plagio y de las negociaciones que ya se estaban llevando a cabo, haciéndoles saber que incursionarían en su territorio para seguir orientando a los padres de la persona secuestrada.

El mismo jueves, a las once de la noche, el papá de la estudiante recibió otra llamada y al secuestrador le hizo saber que sólo tenía una parte de los 500 mil pesos que le habían pedido y que ya estaba en Loreto, por lo que el tipo le ordenó que se trasladara hasta Villa García, concretamente al Panteón Municipal.

El progenitor de la ofendida y los investigadores se trasladaron a dicho sitio, apoyados por elementos de la Policía Ministerial de Zacatecas, con quienes organizaron un operativo especial.

Alrededor de las 4 de la madrugada, ya del viernes 28, el papá de la secuestrada recibió otra llamada, en la que le indicaron que llegara a la puerta principal del camposanto, que dejara el dinero y se retirara, advirtiéndole que si veían policías matarían a su hija y el cuerpo se lo mandarían en pedacitos.

Los policías ministeriales de Aguascalientes y Zacatecas llegaron al lugar señalado y ahí encontraron a uno de los sujetos -Rodrigo Jonathan-, por lo que lo interceptaron y detuvieron.

“El Jona” aceptó su participación en el plagio de la joven y dijo que ésta se encontraba cerca de ahí, en una camioneta y que la estaba cuidando su cómplice, llevándolos al sitio donde se hallaba.

Los elementos fueron conducidos a la avenida principal de Villa García, donde tuvieron a la vista la Grand Voyager, observando a bordo a otro sujeto -Luis Enrique-, que estaba volteando a todos lados.

Sigilosamente se aproximaron a la unidad y detuvieron a este sujeto.

Al registrar la camioneta, efectivamente encontraron en el interior a la joven secuestrada, que estaba tirada en el piso y con huellas de golpes, por lo que la liberaron y entregaron a su padre, que siguió de cerca el operativo de los ministeriales.

La víctima y los dos detenidos fueron trasladados a esta ciudad, al igual que el vehículo.

Ya aquí, en la Dirección de Servicios Periciales, la joven fue revisada por los médicos legistas para verificar las condiciones en las que se encontraba y ella misma les confesó que había sido agredida sexualmente por los dos tipos en varias ocasiones, por lo que sus padres la llevaron a recibir atención médica al Hospital Miguel Hidalgo, donde quedó internada.

Los arrestados fueron interrogados sobre los hechos y señalaron que como se encontraban drogados, decidieron “levantar” a la estudiante y llevársela a Zacatecas para pedir dinero a cambio de su liberación, aclarando que no la conocían y la eligieron al azar.

La propia víctima y sus padres interpusieron una denuncia por su plagio y violación, por lo que el Ministerio Público solicitó a un juez penal una orden de arraigo en contra de los dos zacatecanos, la cual se le concedió por 30 días para continuar con las investigaciones.

Finalmente, el juzgador libró órdenes de aprehensión en contra de los dos tipos, por lo que la PGJE los consignó y recluyó en el CERESO.

El juez Segundo Penal les inició un juicio por secuestro y violación y los sentenció, a cada uno, a 48 años 6 meses de cárcel.