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​¡El Relicario, comunidad olvidada por el Gobierno del “¿progreso?”!

  • Faltan muchos servicios en esa población, pese a que ahí tiene un rancho gallero el diputado priista Francisco “Kiko” Ovalle

 EL CLARINETE

DSC_0349AGUASCALIENTES, AGS.- Dejados de la mano de Dios se encuentran unos 300 habitantes de la comunidad El Relicario, ubicada en el oriente de esta capital, donde adolecen primero de un buen camino que tuvieron de asfalto en buenas condiciones hasta hace unos años.

Además de que la única vía de acceso para esta comunidad de la zona rural de la capital, que lleva a otras como Los Cobos y la Loma, parece piso lunar, también cuenta con poca o nula iluminación, contados contenedores de basura y la testimonial presencia de elementos de Seguridad Pública Municipal.

Sin embargo, en esta parte que se encuentra a unos 5 kilómetros del tercer anillo ingresando por la carretera que lleva de esta ciudad a San Luis Potosí, alberga varias empresas que dan empleo a los habitantes del lugar y de otros lares.

En este sitio se ubican una procesadora de pollo que da empleo a 35 personas, una fábrica de aceite que ocupa 15 empleados, hay una factoría de galletas que emplea a 20 trabajadores, así como una empresa que trabaja para lo que hoy se presume como el orgullo del Estado, la Nissan, que cuenta con 25 obreros.

DSC_0353Pero eso no es todo, ahí también tiene un gran rancho gallero el diputado por este distrito, el 18 local, Francisco “Kiko” Ovalle García, que pertenece al partido en el poder estatal y que cuenta con mayoría en el Congreso del Estado, el PRI, quien ha sido incapaz de generar mejores condiciones para este entorno pese a su posición política.

El legislador tricolor asiste frecuentemente a un predio de una media hectárea, donde cuenta con cientos de gallos de pelea, pero también sufre para llegar al mismo la infinidad de baches que hay en lo que alguna vez fue un camino decente para circular sobre él, y que incluso ante el descuido y desdén de las autoridades se determinó eliminar una ruta de transporte público que hasta hace no mucho ingresaba por la citada vía.

Los “valientes” conductores que se animan a transitar por este camino tienen que hacerlo con extremo cuidado, de lo contrario pueden averiar su vehículo en uno de los cientos de hoyancos que hay en la superficie. Es motivo por el cual muchos taxistas no se atreven a adentrarse en el mismo y muchos de plano niegan el servicio, otros a lo mucho dejan al pasaje en la entrada de este lugar.

DSC_0355Es así que ahora que es tiempo de elecciones, los habitantes de El Relicario confían en que algún candidato a diputado federal de algún partido con peso en los tomadores de decisiones voltee a verlos y cuando vaya a pedirles el voto se percate de las condiciones que rodean a esta marginada comunidad.

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