¡Asesinaron a golpes a un joven por un incidente vial en Aguascalientes!

• En el fraccionamiento Pintores Mexicanos, alcoholizado y en su “vochito” chocó una camioneta estacionada, cuyo dueño lo tundió mortalmente con ayuda de un balconero; los dos escaparon pero ya están identificados

AGUASCALIENTES, AGS.- Por un simple incidente vial, ya que en su “vochito” chocó a una camioneta estacionada y le causó algunos daños, un joven fue brutalmente asesinado a golpes por el dueño de este vehículo y un balconero, que lo agredieron en plena vía pública la noche del pasado miércoles 19 de febrero en el fraccionamiento Pintores Mexicanos y luego huyeron cobardemente.

Los dos presuntos asesinos ya se encontraban plenamente identificados, pero no habían sido localizados.

El asesinado respondió al nombre de Francisco Javier Trinidad Hernández, contaba con 28 años de edad y tuvo su domicilio en la calle Vicente Rojo número 109 del citado fraccionamiento Pintores Mexicanos.

Quienes lo asesinaron solamente fueron identificados como Francisco “N” y Antonio “N”. Trascendió que el primero trabajaba en una empresa de televisión de paga y el segundo es balconero.

El homicidio ocurrió sobre la calle María Izquierdo casi esquina con Renato Leduc de la mencionada zona habitacional.

De acuerdo a la información recabada en este sitio, todo comenzó cuando Francisco Javier viajaba en su auto Volkswagen Sedán, color azul, modelo 1977, con placas de circulación AEP-38-12, circulando de norte a sur por Renato Leduc y al llegar al cruce con Carlos Mérida dio una vuelta hacia su lado derecho, pero lo hizo sin precaución, por lo que con su parte frontal izquierda golpeó el costado derecho de una camioneta estacionada, una Dodge, color gris, con placas AE-48-494, propiedad del mencionado Francisco “N”.

Luego de lo anterior, el operador del “vochito” se retiró de inmediato y se dirigió hacia su casa, dejándolo estacionado en el exterior.

Sin embargo, el dueño de la camioneta se dio cuenta de lo sucedido y como lo identificó como vecino del lugar, decidió irlo a buscar a su vivienda para reclamarle el accidente.

Al llegar, el empleado de la empresa de televisión de paga le dijo que le había causado daños a su camioneta y le indicó que fueran a revisarla para que lo comprobara, exigiéndole que tenía que pagarle.

Francisco Javier accedió a ir con el ofendido hacia la calle Carlos Mérida, donde estaba estacionada la camioneta Dodge, confirmando los daños en el costado derecho.

Aparentemente, el dueño de esta unidad le propinó un golpe a Francisco Javier, molesto por lo sucedido, por lo que éste le habría contestado la agresión.

Luego de esto, se dirigieron a la calle María Izquierdo, donde continuaron peleando hasta que Francisco “N” le pidió ayuda al balconero Antonio “N”, que se aproximó y también comenzó a golpear a Francisco Javier.

Entre los dos lo tiraron al piso y el balconero, que traía puestas unas botas con casquillo, le propinó varias patadas en la cabeza, ocasionándole lesiones de gravedad.

Fue tal la paliza que le propinaron, que Francisco Javier falleció instantes después y su cuerpo quedó tirado sobre la banqueta, boca arriba, por lo que al ver que ya no se movía, los dos agresores decidieron escapar de inmediato.

Varias personas fueron testigos de lo sucedido y avisaron a los familiares del joven, además de que reportaron los hechos a los servicios de emergencia.

Policías preventivos y viales acudieron al lugar así como paramédicos del ISSEA en la ambulancia ECO-272, que revisaron al joven agredido y constataron que ya no presentaba signos vitales, por lo que lo declararon muerto y acordonaron la zona.

Poco después llegaron el Ministerio Público, que dio fe del asesinato del joven, agentes del Grupo Homicidios, que comenzaron las pesquisas correspondientes, y peritos de Servicios Periciales, que se encargaron del levantamiento del cadáver para su traslado al SEMEFO.

Los agentes ministeriales entrevistaron a los testigos y familiares de Francisco Javier, que les informaron la forma en la que ocurrieron los hechos, además de que les indicaron quiénes fueron los que lo mataron.

En el sitio, los investigadores ubicaron y retuvieron a la esposa de Francisco “N”, identificada como Elizabeth Espinoza Córdova, que les dijo que tras lo ocurrido se dio a la fuga y no sabía hacia dónde se fue.

Los elementos organizaron un operativo especial para tratar de localizar a los dos presuntos agresores del joven, pero no consiguieron ubicarlos.