¡Joven empleado murió espantosamente atropellado por un auto en Jesús María!
JESUS MARIA, AGS.- Un joven empleado tuvo una espantosa muerte tras haber sido brutalmente atropellado y aplastado por un automóvil en Jesús María, tras de lo cual el operador aceleró su marcha y escapó a toda velocidad.
La tragedia ocurrió el pasado sábado 31 de mayo, alrededor de las 01:40 horas, sobre la calle López Mateos y la privada Los Mezquites, en el fraccionamiento Las Arboledas, en este municipio.
El ahora occiso fue identificado como Arturo Mancillas Reyes, era conocido como “El Chiquis”, contaba con 21 años de edad, era empleado y tuvo su domicilio en la privada Cerezo número 112 de dicho fraccionamiento.
Al momento de los hechos iba acompañado de su amigo, el mueblero Eduardo Ponce Pérez, de 20 años y con domicilio en la calle Aldama sin número de la zona centro de Jesús María, que fue testigo de los hechos.
Las autoridades ministeriales informaron que los dos jóvenes caminaban por el fraccionamiento citado y que Eduardo iba tomándose unas cubas que había comprado, mientras que “El Chiquis” no iba tomando nada.
El mueblero ingirió alrededor de cuatro cubas y en determinado momento se detuvieron en una esquina ya que Arturo le hablaría a una de sus hermanas de un teléfono público para ver si estaba en su casa e ir con ella para seguir conviviendo.
Cuando hablaba, por el sitio pasaron tres sujetos, que los agredieron verbalmente, pero Eduardo le dijo a Arturo que no les hicieran caso y se retiraran, por lo que así lo hicieron.
Los dos amigos siguieron caminando y llegaron a la calle Mina, que es de doble sentido, andando de sur a norte y a mitad de la arteria.
Faltaban 15 metros para llegar a la calle López Mateos cuando escucharon el ruido del motor de un vehículo, que era desplazado por esta arteria de poniente a oriente, aunque su conductor luego tomó la calle Mina de norte a sur a exceso de velocidad.
Al ver el coche de frente, al parecer un Stratus o Honda, en color blanco, Eduardo le gritó a Arturo que brincara (se hiciera a un lado) ya que se dirigía hacia ellos, pero “El Chiquis” se quedó quieto y fue atropellado con la parte frontal de la unidad, cuyo chofer no frenó su marcha.
El joven cayó sobre el cofre del coche, que siguió avanzando, por lo que trató de sujetarse, mientras que Eduardo corría tras la unidad gritándole al chofer que se detuviera, pero no lo hizo.
Tras recorrer una distancia de 40 metros, finalmente Arturo cayó al piso y como el auto nunca se detuvo, le pasó por encima, provocándole lesiones mortales, tras de lo cual se retiró a toda velocidad.
Otras personas que se encontraban cerca también fueron testigos del accidente, por lo que lo reportaron a los servicios de emergencia y los primeros que llegaron al sitio fueron el comandante Francisco Pérez Pérez, de la Policía Preventiva de Jesús María, y paramédicos del ISSEA en la ambulancia ECO-274, que revisaron al joven empleado y confirmaron que ya había fallecido.
Los testigos informaron al comandante de las características del auto causante del accidente, por lo que ordenó a varios elementos recorrer el fraccionamiento y lugares aledaños en su búsqueda, pero no lo localizaron.
El Ministerio Público se presentó en el lugar para dar fe de la muerte de Arturo, cuyo cuerpo fue levantado por elementos de Servicios Periciales y trasladado al SEMEFO.
Agentes del Grupo Homicidios entrevistaron a Eduardo, que les narró la forma en la que sucedieron los hechos y les indicó que el conductor del auto que mató a su amigo era como de 30 años, de tez blanca o güero, con el pelo muy corto y casi rubio, indicándoles que en el coche viajaban dos sujetos, pero que éstos no fueron los que los agredieron mientras hablaban por teléfono y que no los había visto con anterioridad, por lo que no sabía quiénes eran.
