¡Policías municipales frustraron una extorsión telefónica en Aguascalientes!

AGUASCALIENTES, AGS.- Oficiales de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal frustraron una extorsión telefónica al impedir que un jefe de familia hiciera un depósito de dinero en efectivo ya que le hicieron creer que su hija estaba secuestrada.

Los delincuentes le exigían la cantidad de 100 mil pesos a cambio de la libertad de su primogénita y el agraviado estuvo a punto de entregarles 4 mil pesos, pero debido a la oportuna intervención de los uniformados no perdió su dinero.

Los hechos ocurrieron poco antes de las cuatro y media de la tarde del pasado jueves 12 de junio, cuando el padre de familia se encontraba en su casa, al oriente de la ciudad, y de pronto recibió una llamada telefónica de parte de un sujeto, que le indicó que era integrante de un grupo del crimen organizado y que tenía secuestrada a su hija.

Para hacer más creíble su mentira, el tipo le pasó a una mujer, que llorando le decía al ofendido que la ayudara y que pagara lo que le pidieran para que la dejaran en libertad.

De momento, el agraviado creyó que era verdad que su primogénita se encontraba privada de su libertad, de lo que se valió el extorsionador telefónico para pedirle los 100 mil pesos por su rescate.

El hombre le contestó que solamente tenía 4 mil pesos, por lo que el delincuente le indicó que tenía que irlos a depositar a determinada cuenta en una tienda de conveniencia ubicada en las avenidas Esfuerzo Nacional y Ojocaliente, en el fraccionamiento Municipio Libre.

De inmediato se trasladó a dicho lugar, enterando a otros de sus familiares de lo que estaba sucediendo, por lo que éstos sospecharon que en realidad se trataba de una extorsión telefónica y decidieron dar parte a las autoridades a través de los servicios de emergencia.

Los elementos de la Policía Municipal se movilizaron de inmediato y se trasladaron a la citada tienda, logrando interceptar al ofendido antes de que ingresara a hacer el depósito que le habían ordenado que realizara.

Los oficiales le pidieron que no depositara ninguna cantidad hasta localizar a su hija, de quien les proporcionó su identidad y el sitio en el que debería estar trabajando.

Otros uniformados se dirigieron al centro laboral de la hija del individuo y la encontraron en perfecto estado, comprobando éste que no era verdad que estuviera secuestrada.

De esta manera, el ofendido no depositó el dinero que llevaba consigo y los policías preventivos lograron frustrar otra extorsión telefónica.