¡Murió el alcohólico crónico “El Tanaca” en Pabellón de Arteaga!
PABELLON DE ARTEAGA, AGS.- Un alcohólico crónico conocido como “El Tanaca” murió en el interior de una finca abandonada en esta cabecera municipal tras salir del velorio de su amigo, que murió días antes por la misma razón y en el mismo lugar.
“El Tanaca” respondió al nombre de José Luis Ramírez Serna, tenía 50 años de edad y fue vecino de la calle Octava número 116 de la colonia Popular, en Pabellón de Arteaga.
Los dos decesos se consumaron en una casa abandonada en la esquina de las calles Francisco Serna Lara y Felipe Cleto Camacho de la colonia Progreso, en este municipio.
El primer fallecimiento fue el de Antonio Vera Carreón, que fue hallado sin vida en ese lugar el pasado martes 3 de diciembre a temprana hora.
Antonio y José Luis resultaron ser integrantes del llamado “Escuadrón de la Muerte”, conformado por sujetos que solamente se dedican a consumir bebidas embriagantes hasta que mueren, como fue su caso.
Al pasar a mejor vida, Antonio se hallaba en compañía de José Luis, que estuvo llorando su muerte.
La noche del pasado miércoles 4, “El Tanaca” acudió al funeral de su amigo y se retiró ya en la madrugada del jueves 5.
José Luis fue a su casa pero luego salió para ir a comprar una botella de “Tonaya”, tras de lo cual se dirigió a la finca abandonada, donde se reunían todos los alcohólicos, para consumirla, aunque horas después también fue sorprendido por la muerte.
Alrededor de las seis y media de la mañana, un oficial de la Policía Preventiva, en la patrulla 00193, realizaba recorridos de vigilancia por la colonia Progreso cuando al pasar por la casa abandonada la iluminó con las luces de la unidad y descubrió el cuerpo de José Luis.
Al recordar que el martes había muerto uno de los ebrios consuetudinarios en ese sitio, descendió de la patrulla para ir a ver cómo se encontraba “El Tanaca”, pero lo vio sin sentido, por lo que solicitó la presencia delos paramédicos del ISSEA, que llegaron en la ambulancia ECO-333 y una vez que lo revisaron constataron que ya había muerto.
Las autoridades ministeriales fueron enteradas de lo sucedido, pero al determinarse que el deceso de José Luis fue por causas naturales, no se inició ninguna averiguación previa ni su cuerpo fue trasladado al SEMEFO.
