¡Alcoholizado estudiante quiso violar a una niña en Parras!

• El papá de la víctima la rescató a tiempo; previamente el tipo se masturbó afuera de una casa en El Cóbano en presencia de una mujer

AGUASCALIENTES, AGS.- Un estudiante alcoholizado pretendió violar a una niña de 8 años de edad en la cochera de un domicilio en el fraccionamiento Parras la madrugada del pasado lunes 7 de julio, pero afortunadamente no lo logró gracias a la oportuna intervención del padre de la víctima, que la rescató.

Previamente, el individuo se había masturbado afuera de una casa en el fraccionamiento El Cóbano y en presencia de una mujer y luego pretendió ultrajar a la infante.

El depravado estudiante dijo llamarse Christopher Javier Gallegos Rodríguez, de 23 años y con domicilio en la calle Moroco número 212 del fraccionamiento Parras, que quedó preso en las celdas de la Policía Ministerial acusado por los delitos de atentados al pudor equiparado (considerado como grave), lesiones dolosas calificadas y allanamiento de morada.

La denuncia en su contra la presentó el padre de la víctima, que declaró que tiene otras tres hijas, una de 11 años, otra de 3 años y una más de solamente 3 meses de nacida.

El jefe de familia tenía la costumbre de salir a correr a diario a las 5 de la madrugada.

El pasado domingo por la noche, su hija de 8 años le pidió que cuando saliera la despertara ya que no había terminado su tarea y pretendía hacerla antes de que la llevara a la escuela.

El lunes, el jefe de familia despertó a su hija, que se vistió con su uniforme escolar y se situó en la sala para terminar su tarea, mientras que él salió a ejercitarse como siempre lo hacía.

Antes de retirarse, cerró la puerta principal con seguro (por dentro) y un barandal con candado.

El hombre tardaba casi siempre 40 minutos en volver a su casa, pero esta vez retornó en 20, tal vez por un presentimiento.

Al arribar a su domicilio, se dio cuenta que un sujeto estaba tirado boca abajo en la cochera y con los pantalones bajados hasta las rodillas, por lo que pensó que se trataba de un borracho que había querido a meterse a su casa y que se cayó de una barda.

Sin embargo, al abrir el barandal escuchó la voz de su hija de 8 años que le decía “ayúdame papá, ayúdame”, lo cual lo sorprendió ya que no la había visto y entonces tomó al tipo, lo levantó y lo arrojó a otra parte de la cochera, descubriendo que su hija (vestida) estaba debajo de él y que sangraba de su nariz.

De inmediato, el jefe de familia le dijo a la niña que se metiera a la casa y luego arremetió en contra del depravado, al que le propinó algunos golpes y lo hizo sangrar.

En esos instantes, de la casa salió su esposa, por lo que le gritó que hablara a la Policía.

Al escuchar lo anterior, el sospechoso pretendió darse a la fuga, pero el hombre lo sometió y dos vecinos, al darse cuenta de lo que sucedía, acudieron a auxiliarlo para impedir que huyera.

Momentos después llegaron policías preventivos y le entregaron al estudiante, indicándoles que había querido abusar de la menor de edad.

El jefe de familia habló con su hija, que le platicó que cuando estaba haciendo la tarea escuchó que tocaban la puerta y pensó que era él, es decir, su papá, por lo que fue a abrir y entonces el tipo la agarró y la sacó a la cochera, observando que a éste se le caía un bonete que llevaba puesto.

Le explicó que el sujeto le hizo tocamientos en sus partes íntimas y que no pudo gritar para pedir ayuda ya que le metió la mano a la boca y le tiró un diente, además de que le dio un golpe en la nariz y le provocó un sangrado.

Enseguida, la tiró al piso para tratar de violarla, pero fue en esos momentos que llegó su papá y la rescató.

Tras lo anterior, el hombre acudió a denunciar al sujeto, exigiendo que fuera castigado con todo el peso de la ley.

Tras la captura del estudiante, que estaba alcoholizado, se descubrió que una hora antes, a las 4 de la madrugada, ya había hecho de las suyas en otra casa en el fraccionamiento El Cóbano.

Una mujer despertó al escuchar que su perro ladraba con insistencia y al salir a la cochera vio que el barandal estaba abierto, por lo que lo cerró y fue a enterar a su madre de ello.

Luego, las dos salieron y observaron en la cochera a un tipo en cuclillas y que se cubría la cara, por lo que entraron a la vivienda y llamaron a la Policía.

En esos momentos, el sujeto brincó el barandal y en la calle se estuvo masturbando para luego retirarse.

Al llegar los oficiales ya no lo encontraron, pero la ofendida les proporcionó sus características.

Una vez que fue Christopher Javier fue arrestado por la agresión a la niña en Parras, lo llevaron a El Cóbano y lo confrontaron con la fémina y uno de sus hermanos, y ella lo reconoció como el que se metió a la cochera de su casa y luego se tocó sexualmente en la calle.

Además, su hermano lo reconoció como un amigo de otra de sus hermanas, por lo que al verse descubierto el estudiante les pidió perdón por lo que había hecho.

Sin embargo, fue puesto a disposición del Ministerio Público para que respondiera por sus aberrantes actos.