¡Detuvieron a “El Marquitos”, que asesinó a un jefe de familia en la Olivares Santana!

• Es un adolescente de 17 años de edad y reincidente delincuente con varias detenciones por robo domiciliario
• El homicidio lo cometió al saquear la casa de la víctima, a la que le hurtó 4 mil pesos, con los que se fue a pasear a la playa a Puerto Vallarta

AGUASCALIENTES, AGS.- Agentes de la Policía Ministerial lograron la captura de un reincidente delincuente conocido como “El Marquitos” y/o “El Chore”, de solamente 17 años de edad, como el presunto responsable de haber asesinado a puñaladas a un jefe de familia tras meterse a robar a su casa en la colonia Olivares Santana y ser sorprendido por éste.

El menor de edad le hurtó varios objetos, que luego tiró en un contenedor de basura, y 4 mil pesos en efectivo, con los que se fue a pasear a la playa a Puerto Vallarta, Jalisco, aunque al volver fue capturado.

“El Marquitos” y/o “El Chore”, identificado como Marco Antonio “N” y con domicilio en la calle Pedro García Rojas de la colonia Altavista, resultó con seis ingresos a las celdas de la Policía Ministerial por robo domiciliario y una docena más a la Policía Preventiva.

Por si fuera poco, actualmente tenía una sentencia por robo dictada por el juez Especializado en Justicia para Adolescentes, pese a lo cual andaba libre, además de que su padre está cumpliendo una sentencia de más de 22 años de prisión por homicidio doloso.

La Procuraduría de Justicia le integró al adolescente la averiguación previa DGAP/AGS/03987/04-14 por los delitos de homicidio doloso y robo calificado, por los que le solicitó al juez de Preparación de Justicia para Adolescentes la respectiva orden de aprehensión.

“El Marquitos” privó de la vida a Ernesto Román Hernández de Luna, que contaba con 27 años de edad y tuvo su último domicilio en la primera privada Benjamín de la Mora número 110 de la colonia Olivares Santana.

Las investigaciones de los agentes ministeriales revelaron que la madrugada del martes 1 de abril, “El Marquitos” andaba con otro sujeto (que ya está plenamente identificado pero no ha sido detenido) buscando un domicilio que robar.

Aparentemente, los dos se encontraban drogados.

Al pasar por la casa de Ernesto Román, vio que en la cochera tenía una motocicleta Harley Davidson color negro y un auto Toyota Yaris color gris y con placas AFC-79-44, por lo que el adolescente decidió introducirse para quitarle el estéreo a la moto y buscar más objetos en el coche.

“El Marquitos” se apoderó solamente de la carátula del estéreo, por lo que decidió introducirse al domicilio para ver qué podía robar.

Antes, tocó dos veces el timbre para cerciorarse que no hubiera nadie y como no tuvo respuesta, subió por una de las protecciones de la ventana hacia la azotea, mientras que el otro sujeto se quedó esperándolo en la calle vigilando que nadie se acercara.

Ernesto Román se encontraba dormido en una habitación junto con su esposa y su hija de un año tres meses de edad y, aparentemente, no escuchó cuando tocaron el timbre.

“El Marquitos” bajó por las escaleras del patio e ingresó a la casa, tomando un cuchillo de la cocina para luego tomar varias cosas y 4 mil pesos que estaban en un bolso.

Enseguida, se dispuso a quitar una pantalla de plasma que estaba en la sala.

Fue en esos momentos que el joven Ernesto Román despertó al escuchar ruidos, por lo que salió del cuarto para ver qué sucedía y sorprendió al ladrón, por lo que trató de detenerlo.

Sin embargo, el adolescente lo atacó con el cuchillo que había tomado de la cocina y con éste le provocó cinco heridas punzo-cortantes en pecho y abdomen, una de las cuales le pegó directamente en el corazón y fue la que le causó la muerte.

Todo lo anterior fue visto por la esposa del joven, que también se había levantado y que nada pudo hacer por auxiliarlo.

Tras lo sucedido, “El Marquitos” salió corriendo de la casa y huyó junto con su cómplice, aunque luego se separaron.

En el camino tiró en la calle el cuchillo con el que asesinó al joven y luego parte de los objetos que robó los tiró en un contenedor de basura que estaba cerca del domicilio.

Enseguida, se dirigió a ver a un amigo a su casa, dejándole encargada una sudadera que traía puesta al momento de los hechos.

Las autoridades fueron enteradas de lo sucedido e iniciaron las pesquisas correspondientes, logrando identificar al adolescente como el responsable de los hechos, por lo que lo ubicaron y detuvieron.

Durante las pesquisas, los agentes lograron recuperar los objetos robados de la casa y el cuchillo con el que fue atacado Ernesto Román, el cual tenía sangre de la víctima y coincidía con las heridas que le provocaron.

Tras su captura, “El Marquitos” fue identificado por la esposa del joven como el que lo agredió.

Además, la sudadera que dejó con su amigo tenía sangre que correspondía al finado.

También, la Fiscalía Estatal obtuvo la declaración de varias personas a las que el adolescente les platicó haber asesinado al joven durante el robo domiciliario y su propia confesión de los hechos, en la que indicó que con los 4 mil pesos que se llevó se fue a pasear a la playa a Puerto Vallarta.