¡Joven rinconense casi se mata en una volcadura en la 45 Norte!
RINCON DE ROMOS, AGS.- Un joven resultó lesionado tras volcar espectacularmente la camioneta que conducía a exceso de velocidad, aunque previamente chocó contra dos árboles y un señalamiento mediante el cual se pedía a los automovilistas disminuir su velocidad.
El accidente se registró a las siete y media de la mañana del pasado lunes 18 de noviembre sobre la carretera 45 Norte, a la altura del kilómetro 34+500, desde donde el herido fue trasladado a recibir atención médica al Hospital 2 del Seguro Social.
Se trata de Pedro de Jesús Romo Anaya, de 27 años y con domicilio en la calle J. Encarnación Esparza en Rincón de Romos, que se accidentó al volante de una camioneta Ford Explorer, color café, con placas de circulación AEY-74-80 de Aguascalientes.
A la hora mencionada salió de su casa y tomó la Panamericana en dirección de norte a sur, circulando a exceso de velocidad.
Esto provocó que en el kilómetro referido, frente a una gasolinera, perdiera el control del volante, por lo que aplicó los frenos.
Con esta maniobra, la unidad de motor se “coleó” peligrosamente y luego se proyectó hacia el lado izquierdo, subiéndose al camellón central, donde se impactó contra dos árboles y el señalamiento mencionado.
Tras lo anterior, la Ford Explorer se volcó estrepitosamente y quedó recostada sobre su lado izquierdo, por lo que su operador resultó seriamente lastimado.
Una mujer que instalaba un negocio de gorditas a un costado de la cinta asfáltica fue testigo del accidente, pero tras lo sucedido, fueron los despachadores de la gasolinera los que acudieron en auxilio del joven y llamaron a los servicios de emergencia.
En cuestión de minutos llegaron policías municipales rinconenses, en la unidad 132, y federales, en la patrulla 12655, además de paramédicos del ISSEA, que lo auxiliaron y trasladaron a recibir atención al nosocomio del IMSS.
El estado de salud de Pedro de Jesús fue reportado como delicado ya que con la volcadura sufrió lesiones de consideración en la cabeza y en diferentes partes del cuerpo, por lo que los médicos tratantes hacían todo lo humanamente posible por salvarle la existencia.
